SISTEMAS LOCALES DE INNOVACIÓN:
LAS EMPRESAS PYMES METALMECÁNICAS DE TANDIL (1995 ¿ 2005)

SISTEMAS LOCALES DE INNOVACI?N: LAS EMPRESAS PYMES METALMEC?NICAS DE TANDIL (1995 ? 2005)

Sergio Farinelli

Volver al índice

 

 

 

 

2.4 Procesos Macroeconómicos que condicionan el desarrollo productivo de las PyMEs Argentinas

Bajo las condiciones antes descriptas en las cuales se encontraba Argentina al final de la década del ‘80 nuestro país adhiere a la estrategia desarrollada por EE.UU., para solucionar el problema de la deuda. La misma estaba direccionada al pago de la deuda con industrias y empresas de servicios públicos. En ese sentido se coincide con Sevares (2004) que afirma que “...la deuda no era un problema sino un verdadero negocio a instrumentar”.

A partir de 1990 con la Presidencia de Carlos Menem, se produce una transformación total de la economía bajo el paradigma de Estado mínimo impulsado por el Consenso de Washington, al que hacíamos mención anteriormente, con esto se busca reducir al Estado a sus roles tradicionales (Seguridad, Defensa, Educación, Justicia), esta era una influencia creciente de los grupos económicos y de los organismos internacionales para apuntar al Estado benefactor como ineficiente y responsable de todos los males. (Ferrer, 2004)

Otra transformación política y económica destacable ha sido el fenómeno de “globalización”, caracterizado como “…una nueva etapa del sistema capitalista que fragmentó la función productiva en extensiones transnacionales, afectando contundentemente a todas las economías nacionales a nivel mundial” (Hopenhayn, B. y Vanoli, 2002).

En nuestro país el objetivo inicial fue reducir el gasto, garantizar, la apertura económica, limitar el rol empresario del Estado, y generar condiciones para la radicación de capitales, es decir, operar estos cambios, para que se pusiera al mercado en el lugar central.

Tales reformas, estaban impulsadas por la Comisión de la Deuda Latinoamericana. La Comisión explicaba las ideas de la mayoría de las empresas multinacionales y los bancos de los Estados Unidos a los gobiernos de América Latina este movimiento reformista fue incorporado prácticamente por toda América Latina. Se intentaron primeramente buscar una mayor estabilidad de la economía, seguida de un redireccionamiento de las actividades del Estado. (Zevallos, 2003)

En un primer momento, la estabilidad económica fue alcanzada como resultado de la aplicación del Régimen de Convertibilidad, que a través de instrumentos legales el gobierno fijó la paridad cambiaria 1 peso igual a 1 dólar. “Casi simultáneamente, Argentina se anticipó a la mayoría de los países de América Latina en cuanto al traspaso de activos y funciones gubernamentales al sector privado” (Rapoport , 2002). Esto se manifestó primeramente por la Ley de Reforma del Estado, implementada como forma de promocionar el proceso de privatización.

El proceso de privatizaciones marcó un hito central en la alteración del mapa de grandes empresas del país, promoviendo el desembarco de importantes corporaciones transnacionales. Esto provocó una extraordinaria cantidad de operaciones de fusiones y adquisiciones que se registró con particular intensidad en el transcurso de la segunda mitad de la década pasada, implicando cambios apreciables en la estructura de la propiedad, las modalidades de gestión y el funcionamiento de los mercados en sectores de gran peso en la economía.

Dentro de este contexto, a lo largo de los años ‘90 se fue avanzando en el proyecto de integración regional, el cual fue representado por la creación del MERCOSUR. La apertura comercial experimentada sistemáticamente por Argentina y la integración regional se reflejaron en un fuerte crecimiento del flujo de comercio intraregional y se elevó considerablemente la importancia de Brasil como destino de las exportaciones argentinas. Pero la súbita modificación del escenario económico en el principal socio comercial, consecuencia de la devaluación de la moneda brasileña (Real), dió lugar a reclamos para mejorar las condiciones competitivas de los sectores vinculados al intercambio externo, y en especial para facilitar las exportaciones al Brasil y limitar los ingresos de productos brasileños. Como consecuencia, se generaron visibles tensiones en el ámbito del MERCOSUR. (Levy, 1998)

Aún en la segunda parte de la década del ‘90 las reformas ocurridas pusieron en marcha un conjunto de políticas e instrumentos específicos destinados a fomentar y facilitar la reconversión productiva industrial y modernización empresarial de las PyMEs a través del Programa de Reconversión Empresarial para las Exportaciones. A pesar de los logros alcanzados, el programa no fue capaz de mejorar efectivamente la capacidad de las PyMEs argentinas para competir a nivel internacional y hasta en el mercado doméstico, a partir de la apertura cada vez más acentuada de la economía.

“La Convertibilidad, la Apertura Económica, las Privatizaciones y el MERCOSUR fueron los principales ejes con los que el Estado Argentino definió gran parte de su política en la década de los noventa” (Gatto, 2001). Estas transformaciones políticas y económicas iban a tener una influencia decisiva para el desarrollo del país. A continuación expondremos una breve descripción de cada una de ellas: